No ha sido nada fácil presentar Miradas de Una Ciudad, después de que el ayuntamiento decidiera desaparecer a una semana de mandar el libro a imprenta e incumplir con el compromiso que asumió el mismo Sr. Alcalde, José Bernal, en la financiación del proyecto. Trabajar con personas que no tienen palabra, ni respeto por los demás, es muy complicado.
He de admitir, que los últimos meses del proyecto me han dado más de un quebradero de cabeza y he estado a punto de mandarlo todo a la mierda, aunque al final conseguí volver a sacar fuerzas para terminar lo que empecé.
Son muchos los que se han involucrado desinteresadamente en este proyecto y por ellos, no era justo que esto se quedara metido en un cajón.
Ver la repuesta , el cariño y el interés de la gente por este trabajo ha hecho que todo el esfuerzo valga la pena.
Fue una noche mágica, llena de reencuentros y en la que los verdaderos protagonistas de una ciudad salieron y se hicieron oír.
Muchas gracias a todos los que habéis hecho que Miradas de una Ciudad sea tan especial.